Me dicen el ilegal

Neoliberalismo, globalización y migración

“Lady Libertad” es un proyecto producido por Omar Pimienta, artista fronterizo y profe del San Diego City College. “Proyecto de arte público que pretende crear una dinámica de análisis, práctica y apreciación de la colonia Libertad y sus características específicas tanto geopolíticas como comunitarias.” (Bienvenido a la Colonia Libertad). La ironía de esta obra es evidente. La libertad del imperio encarnada en un cuerpo europeo se sostiene sobre un templo mesoamericano (“pirámide”) mientras que la cerca fronteriza desafía y niega lo que Lady Libertad pregona.

La “creación” de millones de migrantes “ilegales” y la “construcción” de muros, tecnologías y fuerzas represivas capaces de contenerles se han convertido en una de las imágenes más significativas de nuestro tiempo, el tiempo de auge de la globalización neoliberal y el tiempo de su crisis, crisis que arrastra a la humanidad entera a nuestra autodestrucción. Golpeados por las doctrinas de “libre comercio,” millones de pueblos del mundo hemos sido forzados a migrar, a convertirnos en “ilegales” y a reconstruir nuestras vidas entre el frío y el racismo de los nuevos hogares. Diezmados por el desempleo, el hambre, la violencia, la contaminación, los huracanes y las sequías, los y las “ilegales” hemos tenido que marchar entre selvas, desiertos, mares y  montañas del planeta.

La ola mundial de “ilegales” se alimenta de los brillantes economistas de la escuela Neoliberal de Chicago como Milton Friedman y sus discípulos en todos lados. Sus doctrinas han devastado sistemas económicos nacionales y regionales que medio nos protegían y que ellos desprecian llamándolos “populistas.” En manos de políticos conservadores como Ronald Reagan, Augusto Pinochet, Felipe Calderón y Donald Trump, estas teorías económicas se han traducido en políticas de estado que rayan en el genocidio. La miseria, las guerras, la violencia y la contaminación de la tierra han forzado a millones de personas a migrar de su país de origen. De acuerdo al Reporte 2018 de migración internacional de las Naciones Unidas, hay 243.7 millones de migrantes “internacionales” (sin contar la población migrante dentro de cada país), esto es el 3.3% de la población mundial, o en otras palabras, una de cada 30 personas en el planeta. 31% de estas personas han migrado a un país europeo, 31% a uno asiático, 22% a EUA y Canadá, 9% a un país africano, 4% a México u otro país latinoamericano, y 3% a uno de Oceanía. Los tres países que más migrantes expulsan son India (16 millones), México (12 millones) y Rusia (10 millones); los países a donde más llegan son EUA (55 millones) Alemania (12 millones) y Rusia y Arabia Saudita (11 millones cada uno). Las regiones del mundo con mayor densidad de migrantes son EUA y Canadá (15% de la población total), Europa (10%) y Oceanía (21%). Los países que más remesas reciben son India: $68,700 millones de dólares (mdd), China: $63,940 mdd, Filipinas: $28,480 mdd y México: $26,230 mdd.  (Fuente: World Migration Report 2018, by The UN Migration Agency - International Organization for Migration (IOM)


Registro de migrantes muertos y desaparecidos en el mundo, 2016 (English: Recorded migrant death and missing worldwide, 2016). ¿Sólo 180 en México y Centroamérica?  El Movimiento Migrante Mesoamericano estima que más de 70,000 migrantes han desaparecido en México entre 2006 y 2016 y que hay más de 40,000 cuerpos de personas migrantes en morgues públicas. Los datos de Naciones Unidas son grandemente incorrectas.

La migración “internacional” en México tiene momentos claves, todos ligados con la globalización y el neoliberalismo (las nuevas caras del imperialismo). El Tratado de Libre Comercio de Norteamérica que empezó en 1994 arruinó más de 2 millones de familias campesinas convirtiéndo a más o menos la mitad en migrantes “internos” a ciudades y maquilas de México y la otra mitad en migrantes “internacionales” principalmente “ilegales” en EUA. El llamado “Plan Mérida” diseñado por los gobiernos de Estados Unidos y México para combatir el tráfico de drogas inauguró un periodo de violencia sin sentido en México, Guatemala, Honduras y El Salvador que ha obligado a millones de personas a emigrar a Nicaragua, Costa Rica, México y Estados Unidos (Laura Carlsen, Counterpunch, 2015). El Tratado de Libre Comercio de Centroamérica y el Caribe también arruinó millones de campesinos y aceleró la migración a México y Estados Unidos ((Public Citizen). Un refugiado hondureño que escapó de la dictadura impuesta por los militares que derrocaron al presidente Zelaya en 2009 cuenta un chiste que ilustra el punto: “el que salga al último de Honduras que apague la luz.” Otro migrante de El Salvador, a punto de abordar el tren “La Bestia” que espera lo lleve a Estados Unidos contesta: “Cuando el maquinista vea al presidente de El salvador subirse a la Bestia es que ya se quedó vació el país.”

En los últimos años he visto los signos de la migración en muchos rincones del país desde pueblos abandonados en Oaxaca hasta caravanas de jóvenes centroamericanos cruzando México. He preparado tres reportes para este blog.




ODA y la Casa Pocha trata de los migrantes deportadas/os y retornadas/os de Estados Unidos a México. Los “Otros Dreamers en Acción” son uno de los grupos con que las y los Chicanos y México Americanos que regresan a México buscan reorganizar y rehacer su vida. Visitamos la Casa Poch@ donde se reúnen y planean. Tod@s los mexican@s en Estados Unidos que temen ser deportados deben saber de la existencia de esta Casa como un recurso precioso al sur de la frontera.




La 72 es una casa refugio para personas migrantes justo en la frontera México – Guatemala. En el pueblo de Tenosique, perdido en medio de pantanos y manglares, La 72 recibe miles de centroamerican@s que se internan en una tierra de nadie donde son presa de violencia y abusos sin límite. Es un trabajo extraordinario patrocinado por la Orden de Franciscanos pero en realidad construido por la tenacidad, el compromiso y el activismo también sin límites de un puñado de personas.


La Bestia y la Solidaridad es la historia contada por activistas del “Colectivo Ustedes somos Nosotros” ayudando a los y las centroamericanas que atraviesan o se refugian en el centro de México. Es una historia trágica que termina con el asesinato de dos de ellos que a diario se jugaban la vida para llevar ropa, frijoles, arroz y tortillas a las vías del tren donde viajan los y las migrantes.