Principios de un cambio revolucionario

Señal a la entrada de Oventik: “Para todos todo; nada para nosotros.”

“Para todos todo; nada para nosotros. Municipio Autónomo Rebelde Zapatista. Esta es nuestra junta de buen gobierno: corazón céntrico de los zapatistas delante del mundo. Zona Altos" (de Chiapas).

El lema “Para todos todo; nada para nosotros” ha sido uno de los principios zapatistas que más simpatías ha creado en México y en el mundo. El principio indica que, por un lado, aunque la revolución zapatista es de los pueblos zapatistas, ellos no están esperando ningún beneficio exclusivo para ellos. O sea que quieren que el beneficio de esa revolución sea para todos. Pero, por otro lado, los zapatistas son parte de todos, entonces la revolución también les beneficia, pero no de modo particular, exclusivo o egoísta, no para unos cuantos, sino para toda la comunidad o para la comunidad de comunidades del planeta tierra.



Señal a la entrada de Oventik prohibiendo actividades ilegales


“Por acuerdo de las autoridades locales y municipales autónomas se prohíbe transitar vehículos ilegales, la siembra de drogas y asaltos.”

Los zapatistas han impuesto un nuevo orden legal y ético en sus comunidades. Para empezar, las drogas y el alcohol están estrictamente prohibidos. Históricamente, el consumo de bebidas alcohólicas ha diezmado a la población en México y en especial a las comunidades indígenas. Combinadas, las enfermedades del hígado y los accidentes y pleitos producidos bajo la influencia del alcohol son una de las cinco principales causas de mortalidad en México, y la primera causa entre sus jóvenes (Chicanao Dispatches). Por la iniciativa, principalmente de las mujeres zapatistas, se prohibió la venta y el consumo de bebidas alcohólicas . Así ha sido erradicado de las comunidades zapatistas el alcoholismo crónico en las comunidades indígenas que empezó ya con la conquista española hace cinco siglos .

Por otro lado también el crimen ha desaparecido prácticamente de tierras zapatistas. Mientras que la violencia y el crimen organizado asolan a la mayor parte de México, la seguridad y la tranquilidad son impresionantes en Oventik. Una mujer puede caminar sola a las 2 am con la absoluta certeza de que nadie la atacará.

En los últimos años, las empresas productoras y distribuidoras de drogas ilegales, en especial del cultivo de coca, han penetrado a Chiapas. Mientras este negocio se extiende en el estado, particularmente en la frontera con Guatemala, el gobierno zapatista ha definido que no lo permitirá en su territorio. (Sididh
Señal a la entrada de Oventik: “Aquí manda el pueblo y el gobierno obedece”
“Mandar obedeciendo” es quizás el principio de gobierno zapatista más conocido y reconocido. El sociólogo Pablo González Casanova ha indicado que es una aportación a la sociología y mucho más. Dentro de la tradición de las organizaciones de izquierda, progresistas o revolucionarias este principio reformula propuestas previas como la “dictadura del proletariado” y la “democracia popular.” Más que enfatizar el tipo de gobierno (dictadura o democracia) el “mandar obedeciendo” subraya la relación de subordinación del que manda, pues sólo puede ser un gobierno legítimo si al hacerlo, lo hace obedeciendo. Por otro lado, este principio también problematiza a las personas que frustradas por la corrupción en gobiernos de derecha e izquierda proponen "cambiar el mundo sin tomar el poder.” El mandar obedeciendo zapatista supone que un gobierno sí es necesario y que ignorar el problema del poder simplemente no tiene sentido. Los gobiernos zapatistas sí gobiernan, sí son una forma de poder, pero buscan que al mandar lo hagan obedeciendo a su comunidad.